domingo, 27 de diciembre de 2009

La preocupación por el medio ambiente

Ayer, en el diario La Opinión de Murcia, aparecía una de esas típicas noticias-propaganda institucional (llamémosle NPI, aquellas en las que un alto cargo de una Consejería, en este caso, la de Obras Públicas, presenta un catálogo de buenas actuaciones a un periodista, lo que se dramatiza como declaraciones cogidas al vuelo). Se trataba de lo bien que ha quedado la autovía Zeneta-San Javier, que va a solucionar un importante problema de tráfico entre Murcia y el Mar Menor, etc., y que incluye un carril-bici. Me surgen aquí varias dudas: ¿cómo van a meter bicicletas en una autovía? Luego vemos que se trata de un carril en la vía de servicio paralela a la autovía. Otra duda: ¿cómo van a llegar los futuros ciclistas hasta ese carril-bici si en los núcleos urbanos afectados no existe tal cosa e incluso se sanciona a los se ven obligados a pasar por zonas peatonales para ir a su destino? No hay problema: ya se harán los correspondientes carriles-bici urbanos, ¿no? Todo ello vendrá con la nueva (sic) cultura que se pretende fomentar con el uso sostenible y saludable de los medios, etc. Hasta aquí, bien, todo muy razonable. Pero en ese ambiente tan ecológico, ¿cómo se explica que la misma Consejería haya tardado unos 20 días en parar el expolio ilegal del patrimonio natural del volcán de Zeneta para extraer áridos destinados a la construcción de la citada autovía? Obras son amores.... O esta NPI que comento ¿será parte de la obras?, es decir, ¿no tendrá como objeto tapar ese bochornoso incidente? También se alude a que toda la actuación es parte de un plan diseñado para fomentar, además, el uso del transporte público. Perplejo me quedo: ¿se imaginan la nueva autovía llena de autobuses de transporte público llevando viajeros de Zeneta a San Javier? Es difícil, porque, si uno toma de referencia la situación actual de transporte público, con una carretera normal y corriente (eso, sí: bien asfaltada) sería más que suficiente, me temo que de sobra. ¿Se imaginan a un 25% de los usuarios potenciales del trayecto Zeneta-San Javier, en plan sostenible, haciéndolo con su bici? Si se quiere fomentar el transporte público (y hacerlo sostenible) lo mejor es invertir en más y mejores vehículos, y con horarios que satisfagan las necesidades de la población y con tarifas acordes con el material y el servicio, no hacer continuamente que aquella se tenga que ajustar a la imposición de horarios caóticos y volubles. Ese, y no otro, ni siquiera los autobuses gratis los domingos, es el mejor incentivo para que los usuarios se decanten por el transporte público. Finalmente, una autovía es una vía de dominio y uso público proyectada y construida fundamentalmente para la circulación de vehículos automóviles, dice la Wikipedia. Habitualmente, cuando se habla de vehículos automóviles se piensa en turismos particulares. Me temo que todo ésto no cuadra muy bien en ese esquema tan bonito que nos cuenta la Consejería.

viernes, 25 de diciembre de 2009

Ding ding dong

Pues, vale, otra Navidad. Y con lluvia, en mis ciudades (Madrid, Murcia, Oropesa). Esa es la que hace ahora, realmente, "ding ding dong" en el alféizar de la ventana (así, con acento, que si no es verbo, del árabe antiguo: la que toma posesión, toma ya). O sea, que el ding ding dong no viene del cascabel del villancico, a pesar de la fecha en la que estamos. Madrid, Murcia, Oropesa... Oiga, que Oropesa no es una ciudad. Ya, pero como si lo fuese (lo seriese, que decíamos en mi barrio). Cosa de la impronta, la señal que te deja en tu memoria. Antes decíamos en el corazón, pero queda como más técnico o real eso de la memoria. Pero nunca he pasado una Navidad en Oropesa ni en Murcia: todas en Madrid. Cincuenta y ocho Madrides navideños, uno tras otro, todos distintos: lluvia, viento, sol, penas, desazón, extrañeza (yo no soy de aquí, pero sí lo soy: eso es extrañamiento), risas, cariño, amigos, familia, y pocas nieve, pero algunas. Este año toca lluvia y algo de frío, pero se puede pasear por las calles mojadas, por las calles de una de mis ciudades.